Parece que el efecto chiquilicuatre ( http://www.wordreference.com/definicion/chiquilicuatre ) va haciendo su efecto. Anoche los señores Solbes y Pizarro buscaban seducir a los votantes cada uno a su estilo: uno, buen fajador en la política, y el otro, buen analista económico. ¿Que quién ganó el debate? Ya sabéis cómo va esto: ganaron los dos, tal y como pasará el 9 de marzo.
Así que, huyendo de polémicas tan vacías como poco reveladoras, vayamos a lo importante. Rodolfo Chikilicuatre ( http://www.myspace.com/rodolfochikichiki ), uno más de los geniales secuaces de Buenafuente (gracias a La Cubana por tantísimo talento), se ha transmutado en cantante (¿he dicho cantante?) de reguetón y amenaza con mojarles la oreja a los muchos artistas (¿he dicho artistas?) consagrados que han decidido presentarse como candidatos al Festival de Eurovisión. Este año el elegido lo será por votación popular ( http://www.myspace.com/eurovision2008 ), y de momento, el Baile del Chiki Chiki aventaja en más de dos cuerpos al resto de competidores. Si finalmente se alza victorioso y acaba representando a todo un país, el ejercicio de pantomima será perfecto. Algunos incluso nos alegraremos, intentando huir de metáforas fáciles. ¡Eurovisión ha muerto! ¡Viva Eurovisión!
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